¡Algo como Trainwreck!


Hoy era hora almuerzo y aquí en casa decidimos encontrar alguna película para ver. Trainwreck (“Y de repente tú”) fue la película que llegó al azar. Al principio yo decía “es la típica película cómica en donde se tratara de mucho sexo y ya”, pero no fue así. De hecho, pensé que llevaría demasiado humor negro y no lo sentí así. Y eso que yo amo el humor negro.

La protagonizaban la actriz Amy Schumer y el actor Bill Hader. La protagonista de esta historia, resulta ser esa mujer que no se toma muy enserio las relaciones de pareja. Ha tenido sexo con muchos hombres, es una borracha, fuma marihuana y en sinfín de desastres a mencionar. En este, Bill Hader es quien representa a Aaron Conners. En su papel, él es un gran “Doctor Deportivo”. Los deportistas iban con Aaron en caso de lesiones de cualquier grado y demás factores que entran en las complicaciones en el área del deporte. El ayudaba mucho a las personas. Su última relación fue hace seis años y duró apenas 5 semanas. ¿Triste? Seguramente para la mayoría. Pero Aaron era ese buen partido, y no era para menos, puesto a que a cualquier mujer nos encantaría conocer a un hombre enfocado y con aspiraciones, ¿cierto? ¡Al menos a mí eso me atrae! Y esperen… ¡No es muy atractivo! ¡Claro! Ahí es donde la protagonista se siente atraída con el pero no está acostumbrada a salir con hombres como Aaron. Solía salir con idiotas y hombres obsesiones con su físico. En realidad, Amy era la clase de mujer que acostaba con muchos sólo porque sí. 


Amy tenía una hermana muy diferente a ella. Amy no quería sentar cabeza y tampoco quería ser madre (ser madre no es una obligación en mi opinión), pero su hermana tenía su familia y siempre fue muy centrada.

El padre de ambas era una especie de “desgraciado”. Él tenía puestas sus esperanzas en su hermana, no en Amy. Desde siempre Amy fue una mujer fácil. Se notaba lo mucho que detestaba que su hermana tuviera lo que ella decía no podía tener.

Aquí es donde voy a centrarme, ¿De verdad no podía o no sentía que lo merecía? Y es que en esta sociedad se habla de lo peor de una mujer que sea muy liberal. Amy nunca se enamoraba. Era realista. Nunca fingió ser una santa, mucho menos se involucraba en relaciones serias si ella sabía que mentalmente no podría estar preparada. Estos son los casos de mujeres que por muy liberales que sean, no deben ser criticadas si realmente es honesta y no trata de jugar con nadie.


Aunque Amy por ser como era, sentía que nadie debía quererla. Ahuyentaba a las personas y tenía miedo de enamorarse. Y entonces se enamoró de Aaron Conners, el tipo de hombre que nunca conoció. 

Amy era la típica mujer necesitada de un amor sincero. De por si ella no se amaba y respetaba a sí misma, así que Aaron llego desprevenidamente a su vida. Amy escribe artículos para revistas, y odiaba los deportes. Su jefa le gustó el odio de Amy hacia los deportes y le dijo que el próximo artículo le tocaría escribirlo a ella. Es por eso que comenzó a citarse con el Doctor Aaron Conners que es experto en los deportes y en cómo auxiliar a un deportista.

 Aaron se veía encantado con ella, pero no demostraba absolutamente ningún tipo de atracción por Amy. Y Amy lo veía como un tipo aburrido. Ver a estos dos personajes era cómico. Me reía observando lo diferente que eran.


Después del poco tiempo salieron a cenar por cuestión “profesional” pero como era habitual en Amy, esa misma noche al pedirle al taxista que los llevara a casa, pidió que se dirigieran a la dirección de la casa de Aaron. La expresión de Aaron fue de “¿De verdad ella quiere tener sexo conmigo?”, y así llegaron a la casa de Aaron. Amy no se demoró para nada en besarlo y así la situación los llevó a la cama. Aaron deseaba ser afectivo con ella, pero Amy no lo soportaba. De hecho, Amy nunca dormía con ninguno de los hombres con los que se acostaba. Una vez sucedía lo que ella quiera, los echaba de su departamento o ella se iba. Pero esa noche se quedó a dormir en casa de Aaron.


Y la historia entre Aaron y Amy se fue dando cuando él supo que quiera salir de nuevo con ella. A pesar de que era una mujer muy diferente a él, supongo que él veía algo diferente en ella. Amy en un comienzo no sabía cómo actuar. Ya saben, ella nunca se tomó importancia a un hombre y comenzaba a sentir cosas por Aaron, por lo que es extraño.

Amy consideraba a Aaron aburrido, que no tenía el mejor sexo con él… Pero ella se enamoró de Aaron sin darse cuenta. No importa cuán diferente sea esa persona a vos, o si quizás no sea del tipo de físico que te atrae, porque al final lo que cuenta es el amor que nace entre dos personas. 

Y como sabrán, les recomiendo que la vean y por ende no hablare del final. Es evidente que es una historia sencilla, pero me encantó el mensaje de esta historia. No importa como seamos, si somos un desastre y demás. El día que la vida te ponga en tu camino a la persona correcta, vas a cambiar para bien todo aquello que estaba haciéndote un mal. Recordemos que la persona correcta nos hace un bien.

Aaron fue más feliz, comenzó a cambiar en un aspecto más personal. Él ya tenía con quien compartir todo su amor, ya había encontrado a una mujer después de varios años. Dejó de estar solo, y eso es sumamente valido. 

 Solo puedo decir que es una película que demuestra que hay que quitarse tantos prejuicios o dejar de idealizar y decir “quiero que esa persona sea así y así…”. Seguramente estamos destinados a una persona que ama cosas que nosotros odiamos, y así sucesivamente.


Espero mi gran explicación les haya tentado a verla, y si es lo contrario también está bien. ¡Les deseo una feliz noche!




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