Me dedicaba a envolverme en estos temas. Sabemos que Filosofía no es cuestión de expertos; es cuestión de pensantes, que por consecuente nos habla de seres humanos. Y es interesante plantearnos estas temáticas para mejorar como seres humanos. La filosofía te hace crecer como persona y si nunca intentaste leer de ella, nunca comprenderas muchas razones que la llevan a ser la Madre de las Ciencias.
Todo este interés anterior, me hizo llegar a el pensar de Hervé Pasqua y dando como nuevo tema "El tiempo y la eternidad". ¿Estas palabras van juntas o separadas? Si vamos a pensar rápido, nos daremos cuenta que aparentemente, esto sucede. Ya que, ambas palabras tienen significados distintos. Alguien podría preguntarse, ¿Cómo podrían tener alguna similitud?
El tiempo sabemos que no es eterno, entonces básicamente desde ahí pensamos que no tienen algún en común. Pero vamos a adentrarnos e ir claramente hacia el punto que quiero mostrarles en esta nueva reflexion que me dejo esta lectura.
Los seres humanos tenemos vemos en el tiempo una eternidad. Claramente, trato de decir que le tenemos miedo al tiempo, por la sencilla razón en que cada día que pasa estamos contando los segundos y lamentando lo que ayer no pudimos hacer. Dentro de todo temor de que el tiempo se pase muy rápido, es porque sentimos que el tiempo debe ser eterno para nuestra conveniencia.
Nos conviene tener más tiempo para entrar en plenitud, porque eso nos hace plenos. Pero perdemos esa plenitud al concentrarnos en todo lo que perdemos, en vez de pensar en aquello que podemos realizar. Le tenemos un temor muy grande, y Hervé Pasqua nos hace tratar de entender estas palabras en su texto filosófico. Empezando este análisis con:
La realidad del tiempo:
Aristóteles definía al tiempo "Como una medida de lo que cambia". Pero, el tiempo también es aquello que vemos y deducimos de las cosas con el pasar. Kant trataba de explicarnos que esto el tiempo esta ante nuestros ojos y esa manera entendemos cómo y donde van todas esas etapas de la vida. Ya que tomamos del tiempo esos instantes, lo que nos hace darnos cuenta que el tiempo también es sensibilidad.
Al adentrarse a la eternidad, es llegar a la vida después de la muerte. Porque al no querer irnos, queda a entre ver que la eternidad que existe de nuestro ser, es la necesidad de no creer que nos iremos definitivamente en cualquier momento. Lo que el denomina esto al considerar el tiempo, se exige que la eternidad este presente.
Sabemos que la en la filosofía se hace a entre ver muchos puntos de vistas que se alejan de la religión, pero esta en nuestras creencias darnos en que sentido hemos de ser eternos. Sin poner en juicio un argumento y tampoco otros argumentos que defiendan o no esta posición.
La eternidad, necesaria:
Para concebir el tiempo, debemos dejar entrar el concepto de la eternidad dentro del tiempo. Las razones que Hervé Pasqua nos plantea, es que debemos dejar de pensar de la eternidad como una ilusión. Según el, la eternidad no es precisamente una ilusión, porque para el es necesaria.
Leí algo que me pareció un argumento muy claro, y verídico, porqué no decirlo así. Nietzsche dice: "El hombre, dice, busca la realidad en lo permanente para huir del sufrimiento que nace del cambio, de la ilusión, de la contradicción." Esto tiene como explicación, que parte de nuestro soporte del pasar del tiempo, es la eternidad. El creer en la eternidad, nos brinda esa esperanza del tiempo. Nos hace ser menos temorosos, aunque como opine anteriormente, en toda necesidad existe un temor y tal vez en este texto no lo argumenten, pero es aquello que yo misma he deducido.
Entonces, al implicarse la eternidad, se rechaza el tiempo. La eternidad no es temporal, no tiene sucesión porque es infinita. El tiempo si es temporal y si tiene una sucesión de las cosas. Que según sus palabras, para aceptar el tiempo, tenemos que rechazarlo. Ese temor se iría por completo, porque al ser la eternidad una ilusión, no estaríamos cayendo en el temor de la sucesión y de aquello que podrá arrebatarnos o irse de una vez. ¿Sera que disfrutamos más creyendo en la eternidad siendo conscientes que esta es una ilusión? Claramente sabríamos que una ilusión, no es una realidad. Pero debemos comprender que al no tener un poco de ilusión en nuestra vida, se pierde el sentido que la vida misma tiene por caer solamente en lo realista.
El ser humano desearía de una eternidad lineal, sabemos que una manera de entender lo que es lineal, es adentrándose a las letras. Las novelas tienen un tiempo -Puede ser mosaico, lineal, etc.- Por ejemplo, el mosaico no tiene un comienzo del todo, sino que esta novela comenzara en otro momento de la vida de los protagonistas. En cambio, denominar que una novela es lineal, es porque tuvo un comienzo y un orden. Claramente sucede lo mismo en la eternidad lineal que deseamos, porque vivir tal cual ha sido pero sin un fin. Queremos que el tiempo pase y que al mismo tiempo, nuestra ilusión prevalezca.
Siendo que "La eternidad es el infinito de la duración". A lo que concluye esta etapa de análisis, con decirnos que el tiempo sera una ilusión, pero dentro de nosotros no es algo ilusorio y tampoco es la huida.
Entonces, claramente, nos dice que la permanecemos por el presente y no de alguna u otra manera por las anteriores. Dentro de nosotros existe un temor, pero que realmente no tiene que ver claramente con lo que es en nuestra alma. No deseamos huir, solo vivir y vivir el presente. Por eso, estancarse en el pasado, nos impide trascender.
Y Hervé Pasqua concluye esta pensar, con lo en mis palabras diría "Dios es nuestra única eternidad". Aun y se crea o no en el, hemos de saber que el estará eternamente sirviendo para nosotros y amándonos como nadie lo hará. A pesar de la huida o el deseo de permanecer en el presente, hemos de saber que el sera nuestra eternidad, y no huir o permanecer en sucesión por el resto de nuestros días.
Esta es la eternidad en "hoy", en nuestra actualidad.
Espero este tema les haya hecho reflexionar tanto como a mi. Ya he de decirles, que la Filosofía es importante para nuestro ser. Leerla es claramente una decisión de sabios.
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