¡Ay, el amor, el amor! Enamorarse es lindo, pero no sabemos si realmente la persona por la que tenemos esos sentimientos nos corresponde de la misma manera. ¿Cómo podemos asegurarlo? Muchas veces hay señales son claras pero no las queremos ver.
Por estos motivos, existen tres enemigos de cupido. Esos tres que vuelven el amor débil y susceptible; que carece de sentido y razón de ser.
El físico
¿El amor entra por los ojos? Esa es la pregunta de muchas personas, puesto a que hay muchas relaciones basadas en la forma en la que te miras o cómo vestís. Es tal la incoherencia, que la gente mágicamente deja de sentir amor cuando la persona cambia su aspecto por asuntos de peso o porque no siempre anda esa vestimenta que les gusta. Aquí inician las críticas y algunas personas caen en ello, tratando de lucir como su pareja quiere para complacer.
¿En dónde queda el amor propio? No te rebajes a su nivel. Nadie se puede enamorar de un físico, solo podemos sentirnos atraídas y atraídos al mismo. Claro, para que te interese conocer a alguien, hay algo que físicamente te atrae, puesto a que nadie puede ver el tipo de persona que alguien es con verle de pies a cabeza.
La realidad es que la atracción SÍ está mediada por lo que subjetivamente a cada persona nos llama la atención. Por ejemplo, a mí me encantan los hombres altos y rubios, pero nunca salí con chicos demasiado altos y mucho menos rubios. ¿Qué intento decir con esto? Aunque los chicos no eran exactamente como mis gustos, no significa que no me pudiese enamorar de ellos.
Al final, el físico no lo es todo. Si intentas convencerte de que eso te enamora, estás en un tremendo error, porque las relaciones de pareja son duraderas por lazos emocionales.
El qué dirán
Este es el menos usual, pero se da de todas maneras. Algunas personas buscan demasiada aprobación de sus amistades o el círculo social que le rodea.
He visto casos en donde un individuo de la pareja tiene una mejor posición económica y asume que si alguien se acerca a él o ella por un interés sentimental, no puede puesto a que no tienen el mismo estilo de vida y mucho menos según ellos, la misma educación.
¿Qué clase de teatrito es este? Me parece ridículo que solo quieran personas de su mismo entorno y no piensan que si las relaciones pasadas están basadas en ese criterio, por algún motivo no funcionaron, y la respuesta es que están convirtiendo sus relaciones desde un punto tan superficial.
Pensar de esa manera, no atrae al amor de tu vida porque mentalmente estás decidido a que solo es blanco, cuando también puede ser azul.
El dinero
Es bonito recibir obsequios y que te apapachen con ciertos lujos, pero el dinero realmente no compra el amor, sino que más bien vuelve atractiva a una persona para quien sienta importancia por la vida costosa.
¿Saben qué pienso de ese engaño? Que es triste vivir en una gran mansión y para no irnos tan lejos, vivir de forma cómoda, solo para terminar tus noches al lado de la persona que NO amas. ¿De verdad esos lujos lo valen todo? ¿Qué se siente besar sin amor? ¿Qué se siente decir que querer a alguien que no querés para recibir algo a cambio?
Respondan y deduzcan, porque no se me ocurre ningún sentido positivo sobre ello. Vas a poder comprar muchas cosas, pero si seguís así, jamás vas a conocer el amor.
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