Lo que
para muchas personas ha resultado evidente, es que en el mundo el físico ha
tomado el lugar como “lo más importante”. Tienden a medir el éxito con tu
físico, la belleza con tu físico, tu intelecto con el físico, tu personalidad
con tu físico, tus hábitos con tu físico… ¿De verdad esto es así?
Entre una crítica constructiva y el hecho de criticar,
no existe una igualdad. Sabemos que criticar es lo que la gente ama hacer y en
el caso de las mujeres, siempre nos vamos en la colada. Hagamos lo que hagamos,
siempre van a criticar a una mujer por su físico.
Quizás esto es más común entre mujeres que entre
hombres. También los hombres critican a las mujeres por su físico y sé de
quienes dejarían perder a una mujer maravillosa porque la consideran atractiva.
Ese ya es un tema aparte, pero aquí va la finalidad de mi entrada.
Uno piensa que se critican más las curvas, y puede ser
que así sea. Saben que yo defiendo las curvas y tengo mi opinión acerca del
físico en relación con la salud. Pero, si bien sé que también se critican los
cuerpos muy delgados. A la vez mucha gente defiende los cuerpos voluminosos y
habla pestes de una mujer sumamente delgada, ¿Acaso eso no es una doble moral?
Ser muy
delgada es motivo de admiración o de ofensas. De admiración porque desde varias
décadas para acá, la gente alaba la delgadez y si es extrema mucho más. Paso
por las tiendas y veo esos maniquís cada vez más delgados y por supuesto que es
una manera de decirles a las mujeres “Tienen que ser así para entrar en esa
ropa”.
Esto de la
moda no tiene su verdadero sentido plasmado. Ahora moda es ser una talla pequeña
y no el hecho de disfrutar de las prendas. La moda no es eso, sépanlo. Y no
intento decir que ser delgada está mal. Lo malo es el mensaje de la sociedad.
Las ofensas
son muchas para quien es delgada. Si te ven más delgada de lo normal, y esto si
ya sos delgada, surge comentarios como: “¡Vas a desaparecer!”, “Deberías de
comer”, “Anoréxica”, “Enferma”.
Está muy
mal decir que una mujer muy delgada es enferma cuando naturalmente es así. Se
debe saber detectar a una persona delgada sana de una enferma. Y aunque les
cueste creerlo, muchas mujeres delgadas anhelan las curvas o tener más de aquí y
por allá. ¡Las mujeres delgadas también se acomplejan!
Luego se
defiende a una mujer voluptuosa saliendo en lencería en las redes sociales, lo
cual amo. La situación es que la gente ve a una mujer muy delgada sintiéndose guapa
en una lencería en donde quizás por su mismo cuerpo si tiendan a marcar algunos
huesos y comienza el ataque. ¡No es así!
Si apoyas a
una mujer con curvas, no insultes a una delgada. ¿Por qué? Porque estas
discriminando y siendo una persona de doble moral.
Esa mujer
preciosa que ven ahí, es una modelo de tallas grandes muy famosa. Se llama Tess
Munter. Es de las mujeres que ha puesto en alto las tallas grandes y la belleza
de una mujer con muchas curvas.
Ahora,
mucha gente ofende que una mujer como Tess ame su cuerpo a pesar de no ser
delgada y que lo muestre al mundo, ¿Por qué? ¿Sera envidia ante tanta
seguridad? No lo sé, pero si estoy segura que estamos en una época de promover
la aceptación de tu cuerpo.
Hablar de
muchas curvas es tocar el tema de la salud. Sé de ese tema muchísimo y también sé
que las personas no están informadas al respecto. No se trata de convencer a
nadie, es más que ni vale la pena. Pero si debemos aprender a respetar y
aceptarnos unos con otros.
Una mujer
con curvas segura de su cuerpo resulta una mujer estúpida para la sociedad. Y
muchos hombres lo niegan, pero alguna vez en su vida vieron a una mujer con
curvas y pensaron en lo hermosa que ella era. Eso lo sé y aunque muchos lo
nieguen porque están en el papel de superficiales, es así.
La mujer de
talla grande también debe ser admirada por su belleza. Ya eso de que porque no
encuentran ropa y porque la salud ya quedó atrás y aprendan a lidiar con ello.
Mujer
gordita, deja de menospreciarte y sentirte poco atractiva. Deja de decir “Ojala
fuera como ella…”. No se trata de eso, piénsenlo. Una mujer puede adelgazar y
eso no quiere decir que se ame a sí misma. Amarnos es un proceso de toda la
vida, desde que naces y te aceptas como ser humano. Tus tallas no te hacen
amarte.
Las tallas
son tallas, no le den tantas vueltas al asunto. La industria de la moda impone
un cuerpo, pero quien tiene el mando en caer o no sos vos.
Ahora, seré
algo breve comentando sobre esto. Vean el cuerpo de esa mujer, ¡Precioso! Y
aparte de que se ha convertido en una moda tener trasero, busto y caderas
enormes. Muchas mujeres se operan para quedar así porque según todo mundo dice
que ese tipo de curvas te hacen más bella.
Repito, ¿Por
qué creer en eso? Si cada mujer tiene su cuerpo. No es como si estés mal por no
tener un trasero grande si por genética quizás no sos de tener mucho trasero. No es como si a fuerza tenes que tener una cintura diminuta y grande caderas, etc.
Mis
Conclusiones:
Siéntanse
bellas con su cuerpo, ¿Si? ¡Siéntanse orgullosas de ser quien soy! El amor
propio no aumenta con llegar a tu cuerpo deseado. El cuerpo no compra el amor.
El amor lo sembras vos y nadie más que vos.
La sociedad
va a criticarnos seamos como seamos. El cuerpo se ha convertido casi en un
servicio público en donde todos quieren opinar. Es difícil cambiar la
mentalidad de millones de personas, pero vos que sos dueña de tu cuerpo,
aprende a amarte y a empezar por aceptarte sea cual sea la manera en la que
luzcas.
De
cualquier talla que seas, si no sembraste amor, no vas a amarte de ninguna
manera que luzcas. Así que, seas muy delgada, con muchas curvas o como seas, ¡Ve a presumirlo! Sácate partido y no te sintas inferior a ninguna otra
mujer.
La belleza
externa es subjetiva, lo he dicho muchas veces. Y no depende de loa demás la
manera en la que te ames, sino de vos.
Comencemos
poco a poco a querernos, y si deseas cambiar tu físico, hacelo por vos y no porque
deseas encajar en la sociedad.
¡Feliz
Martes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario