“Capítulo
12 de 12”
La imagen
dice algo completamente cierto. ¡El último mes del 2015! Y no centrare mis
palabras hacia lo que fue el 2015, porque realmente no es el momento para
hacerlo. Pero, como cada mes, siempre intento reflexionar un poco del mes
pasado y del inicio de un mes tan esperado desde comienzo de año.
Sí, es un
mes “cualquiera” para la mayoría. Pero Diciembre es más que eso. Es el mes en
el que culmina el 2015 y muchas personas consideran que ya no quieren más de
este año. ¿Les pasa eso?
Entonces
Diciembre se convierte en un mes de transito muy rápido, veloz… ¡Perdemos la noción
del tiempo! Las festividades y para muchas personas, un mes en donde los
sentimientos se encuentran a flor de piel.
Para mí,
estas fechas son de pasarlas con quienes más amo pero la disfrutare dependiendo
de cómo fue mi año (no comentare aun de ese tema), por lo que, me resulta muy
importante saber alejar esas malas vibras de un mes en donde se incentiva a una
unión y de encontrarse con uno mismo (a).
Un mes
puede ser de la manera que vos lo deseas, o quizás logres culminar muchas de
tus metas en este mes. ¡Nunca se sabe! Aprendí a creer en mucho, en cambio aprendí
a no cegarme a nada. Al final, será tu actitud la que traiga consigo hechos
esperados.
¿Mi reflexión?
En sí, una reflexión muy concreta es complicado de decirlo. No quiero caer en
lo fetiche y desearles “magia” en este mes de Diciembre. Se escucha hasta un
tanto comercial. Mi reflexión se inclina a que te inclines a tu persona.
Pensemos en el ayer (sin aferrarnos) y sin más, no intento decirles que digan a
si mismo que han cometido errores en el pasado cuando perfectamente sabemos es así,
¿O me equivoco? Sino que pensemos si nos sentimos bien, si nos hemos acercado a
lo que deseábamos y si aún creemos que vale la pena seguir nuestra vida a través
de ese camino.
No está mal
llevar la vida de una manera y luego redimirse. De todas maneras, quien no vive
para contarla no comprende porque debe apreciar su vida. Este pensamiento que
les escribo puede aplicarlo para cualquier etapa de la vida y no perderá su
sentido.
Puede ser
que en ocasiones queremos ver lo que no es, cuando las situaciones nos dicen “no”.
Eso no significa que debas centrarte en que los riesgos y las dificultades sean
de echarse para atrás.
Aquello que
ya no funciona, ya no te llena y no te hace sentir de la misma manera que en un
comienzo, es porque ya no debes darle más vueltas al asunto y alargar aquello
que sabes no saldrá bien. ¡Dale una bofetada! ¡No sigas esperando lo que no va
a suceder!
No
significa que mágicamente las cosas sucederán, sino que significa que estando
esa piedra no vas a abrir tu mente a lo nuevo, o no vas a esperar nada
considerando que “ya tenes lo que necesitas”.
Analicemos
esto y dediquémoslo a disfrutar de este
mes lleno de celebraciones, amor, mucha parranda, comida rica… ¿Qué más
quieren? Solamente no nos amarguemos, ¿Si?
¡Les deseo
que sea un mes precioso para todos ustedes!
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